Querido Emprendedor

Querido emprendedor:

Hoy, con una taza de café negro y sin azúcar en la mano, reflexiono después de más de 10 años de experiencia: emprender es un desafío. Sí y no… He visto imperios de humo crecer rápidamente, y grandes ideas hundirse en el olvido. ¿Dónde está la clave? En mi país diríamos: ¿Dónde está la bolita?

Después de trabajar con más de 150 clientes, estoy convencida de que la clave está en creer firmemente en tu producto o servicio. Se trata de otorgarle el valor y el reconocimiento que merece. Esto es lo que te permitirá construir un gran valor de marca alrededor de tu idea, fortalecerla y dotarla de una identidad única. Construir un ADN distintivo es esencial para añadir valor genuino.

A menudo leo la frase «hay que trabajar construyendo valor» en los grandes libros de marketing, pero esta idea suele estar cargada de ambigüedades. Otorgar valor significa que tú, como primer usuario, entiendas plenamente el valor y el precio de tu producto o servicio. Solo así podrás identificar a tu público ideal, ese grupo de personas que apreciará y respetará tu empresa.

Debemos dejar de lanzar al mercado compañías sin alma. El dropshipping está bien, pero solo cuando se le añade valor. Si eres simplemente otro vendedor con imágenes genéricas del mercado asiático, no podrás escalar tu negocio.

Mi café está por terminar, y hoy concluyo que lo que permite que un emprendimiento tenga capacidad de escalar, proyectarse y posicionarse es su valor: su valor como marca y su valor como solución.

Con Cariño NUMADAS.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *